Siguin, senyors, de flors o de ferro les cadenes que lliguen esretament la nacionalitat catalana i les demés nacionalitats espanyoles, les cadenes sempre seran cadenes"

Àngel Guimerà davant l'Assamblea de Manresa.

dimarts, 30 d’octubre del 2007

Quina diferència de tracte. (La Vanguardia)


Jo pensava que La Vanguardia tenia Síndrome d'Estocolm, però últimamnet i sobretot amb aquest nou canvi de disseny s'ha fet un diari Espanyol com el que més. De Mayor Oreja, un tio que defense les dictadures no ha dit absolutament res!!! En canvi us recordeu d'aquella editorial de l'onze de Setembre??? (Llenguatge típic del mundo.)


Opinió sobre el soberanisme: de un tiempo a esta parte, proliferan las manifestaciones de un soberanismo de corte maniqueo, con frecuencia maleducado e hiriente, que envenena las relaciones de Catalunya con el resto de España (com si la premsa de Madrid no fes res) estableciendo una relación de vasos comunicantes con el españolismo catalanofóbico, su gran beneficiado. La comprensión o el silencio que han rodeado la quema de fotos del Rey en Girona y la conversión del engreído treintañero incendiario en mártir de una supuesta España represora son el último capítulo de un bochornoso serial ideológico. Protagonistas de tal serial son las plataformas independentistas - que obtienen un tratamiento periodístico muy por encima de su representatividad- y algunos personajes pintorescos


Sobre López Tena: aquel destemplado jurista que ha conseguido notoriedad denunciando a un Estado de cuyo aparato participa".



Sobre Joel Joan: algunos personajes pintorescos: aquel celebrado actor que no consigue diferenciar los ingeniosos balbuceos de su personaje televisivo de la lamentable charlatanería de sus mítines;



Per acavar , més canya amb el Soberanisme: se trata de un soberanismo de vuelo gallináceo, tan estridente como irreflexivo, fundado en los tópicos de la visión romántica de la historia. Su relato es sentimental y sus acusaciones no alcanzan sólo al Estado, a los políticos españoles o a España en general, sino también a políticos y miembros relevantes de la sociedad civil catalana, acusados de connivencia culpable y de cobardía, cuando no de traición. Esta visión de las cosas se divulga con sospechosa redundancia, a veces en tono sarcástico e insidioso, a través de unos medios públicos que deberían respetar escrupulosamente todas las sensibilidades ciudadanas".( i tu amb esta editorial estàs respectant el sobiranisme?)


I finalment: Este soberanismo visceral acostumbra a reclamar del Estado español, con grandes aspavientos, el pleno reconocimiento de la pluralidad interna, pero es incapaz de reconocer, siquiera de respetar, la enorme pluralidad que anida en la compleja y cambiante sociedad catalana. La desacomplejada parcialidad con que desde los medios públicos se comentan los acontecimientos deportivos es el ejemplo más popular de la falta de respeto a la pluralidad catalana. La visión despectiva de las selecciones españolas o el tradicional barcelonismo de estos medios, ya de entrada discutible (según las estadísticas, un 40% de los catalanes son forofos de otros equipos), ha derivado en los últimos años en inaceptables formas de antimadridismo. No vale la excusa de que en algunos medios públicos de Madrid se cometen los mismos errores. Los extremismos extremismos se necesitan y alimentan mutuamente, pero Catalunya –que ha salido muy fatigada del reciente cambio estatutario– necesita cordura, seriedad e inteligencia para poder plantear sus justas reivindicaciones y debe exponer sus necesidades armándose de razón, no de excesos. Nada puede perjudicarla más que aparecer identificada con posiciones infantiles, extremistas


No hem direu que aquesta editorial no és més pròpia del Mundo o de La Razón que d'un diari de Barcelona.